Este mal hábito hay que corregirlo. Siempre hemos sido opuestos al bajo vocabulario. A los que ponen al desprecio público a personas jurídicas o naturales. Las leyes vigentes se aplican a quienes las infringen. Pero igual para todos. Nadie tiene el derecho por ser autoridad, violarlas. El castigo es recíproco. De allí que en todas las naciones, existan las Constituciones. Es la manera para que la ley no obstruya la legalidad de actos o hechos democráticos.
Venezuela, como País, que nos impone el deber y el derecho a respetar la Carta Magna, aprobada por los ciudadanos que la constituyen, no escapa que sea aplicada sin excepción de ninguna naturaleza.
Esta violación, se viene haciendo costumbre entre los Poderes Públicos que la conforman y por la mayoría de la población. Solamente con salir a la calle, usted se da cuenta que aquí la autoridad y el ciudadano, cometen desacatos a diestra y siniestra. ¿Quién le permite a un conductor, estacionar su vehículo arriba de las aceras? ¿Por que las autoridades se hacen la vista gorda cuando miles de empresas, se establecen en urbanizaciones residenciales, para evadir los impuestos que le corresponden al fisco y a las alcaldías recaudar?
Pruebas de infracciones a nuestras leyes son múltiples y por eso, la Nación, que debemos cuidar y mostrarla al mundo como ejemplo de desarrollo, cada vez, se hunde en el desorden y en la desobediencia a la justicia. Es un comportamiento peligroso porque se pone de manifiesto que no somos un País, preparado para escaparse del subdesarrollo. Se añadiría al texto del refrán : la mala costumbre se hace ley.
Ustedes dirán ¿ Y que tiene relación el encabezado de la entrega de hoy con lo antes expuesto?
Sencillamente, que tristemente los comunistas que nos mandan, quieren acabar con una empresa venezolana, que es símbolo de progreso en todos sus órdenes. Además de llevarle a cada venezolano, toda clase de alimentos y productos, beneficia mensualmente a miles de empleados de manera directa e indirecta. Empresas Polar y la Fundación Polar, son ejemplo del trabajo creador. En lo económico y social. Un trabajador que a ellas pertenezca, nunca podrá expresarse mal de sus patrones.
La justicia es clara en cualquier lugar del mundo. Se debe aplicar sin contemplaciones. Pero también debe reconocer, que no es lo mismo que felicitar, cuando una empresa, cumple con todo el ordenamiento legal para trabajar y para cumplir con el objetivo para lo que fue fundada.
En sus 75 años al servicio de los venezolanos, Empresas Polar, se ha distinguido en cumplir con lo establecido por las leyes que regulan sus actividades. Hay que recordar, cuando el actual Gobernador del Tachira, José Gregorio Vielma Mora, para entonces Superintendente del SENIAT, declaró más o menos, a través de los diferentes medios de comunicación, que Empresas Polar, era ejemplo o modelo en cumplir cabalmente con el sistema tributario en Venezuela.
Los lectores podrían creer, que este fiel cumplimiento haya desaparecido en los siguientes ejercicios fiscales, hasta el presente? Por el contrario, esa pulcritud en el manejo de sus diferentes productos o artículos, se ha mantenido e inclusive adaptando mejoras, gracias a la tecnología. En Empresas Polar, se motiva al trabajador no solamente en su prosperidad económica; es que además cada uno de sus miles de empleados, se les motiva para que los cargos que desempeñan, los realicen con ese espíritu que los caracteriza, para alcanzar tanto dueños como empleados, un lugar preponderante en el desarrollo del progreso nacional.
Empresas Polar y la Fundación Polar, no se detienen en la producción o fabricación de productos que los venezolanos consumen; es que con todo orgullo, dedican grandes presupuestos para promover funciones sociales en los estratos populares de la Nación. La instrucción, y capacitación son ejemplos de esta labor que no estarían obligados a emprender, pero la política de ambas, es contribuir con el empleo en estas áreas, que son básicas para que un País, prospere y crezca de manera social. Estas obras que Polar, se ha trazado, están a la vista en todos los rincones de Venezuela. Ni se diga de su decidida y constante promoción y apoyo en diversas disciplinas deportivas, que van desde lo amateur hasta lo profesional. Estas acciones no tienen limitaciones en la edad y por eso, niños, adolescentes, jóvenes, adultos y de la tercera edad, son favorecidos por estas labores empresariales, educativas, sociales, deportivas y culturales que sería mezquino e irresponsable no reconocerle a la Polar.
Ante una realidad palpable, es incomprensible que exista ese ACOSO AL OSO, que lo ha dado todo en base al trabajo creador. Fiscalizaciones, desvíos de productos, detenciones a empleados y todo lo que signifique perturbar el diario trabajo, es lo viene soportando esta empresa, que repetimos, es ejemplo de eficiencia y responsabilidad. ¿Sabían sus detractores, cómo Lorenzo Mendoza, se inició en Empresas Polar? Todos tenemos la oportunidad de superarnos, y el deber de los sectores públicos y privados, es fomentar el trabajo para alcanzarlo.
No es esta la primera vez, que defendemos a la Polar. En los años 80, en el Vespertino EL MUNDO, crticábamos que en un evento realizado en el Poliedro de Caracas, se preferìa que una cerveza extranjera tuviese la exclusividad de la venta y titulámos: "RESPETEN AL OSO".
La frase de hoy : "Cuando advierta que para producir necesita obtener autorización de quienes no producen nada; cuando compruebe que el dinero fluye hacia quienes trafican, no bienes, sino favores; cuando perciba que muchos se hacen ricos por el soborno y por influencias más que por el trabajo, y que las leyes no lo protegen contra ellos, sino por el contrario son ellos los que están protegidos contra usted; cuando repare que la corrupción es recompensada y la honradez se convierte en un autosacrificio, entonces podrá afirmar sin temor a equivocarse, que su sociedad está condenada"
( Ayn Rand ).
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03 de Agosto 2016 PM
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