DESLEALTAD A MARÍA CORINA... ( Gastón Echeverría C. )

Estamos indignados. Los venezolanos están irreconocibles. El mal se apoderó de nuestra sociedad. Se perdió la lealtad a las personas. Ahora es normal la traición. La ingratitud. Nos ha costado creerlo. Pero el demonio de la política no perdona. Se instauró hasta en la dirigencia opositora.

María Corina Machado, ha sido una mujer leal a sus principios. Jamás engaño a los demás integrantes de la oposición. Emergió cuando Súmate. Fue promotora del famoso referendo popular. Donde se recogieron más de  3 .000.000 de firmas. Eso le valió la campaña en su contra por parte del régimen. Que hasta le prohibio salir del Páis. No le perdonaron su tenacidad. Que aprendió desde niña. Quizá un pariente que se rebeló contra el dictador Juan Vicente Gómez, le dejó esa estela en la lucha por la libertad.

Luego, María Corina, en el 2010 , es candidata a la Asamblea Nacional, siendo la más votada entre los aspirantes oficialistas y opositores. Esto, tampoco se lo perdonan los malos políticos. Es la envidia. La mezquindad. María Corina, se ha destacado, como la mejor parlamentaria de la oposición. Valiente y decidida por decir la verdad.

En una ocasión, le expresó al entonces presidente Chávez, que expropiar significaba robar. No se lo mandó a decir, se lo dijo personalmente en la Asamblea Nacional. Hugo Chávez, reaccionó con prudencia, pues entendió que no se enfrentaba a los acostumbrados diputados de la MUD, que en su mayoría, nunca se atrevieron a exponer con gallardía, sus argumentos, contra el rumbo que tomaba el régimen.

Aceptó ir a las primarias para la candidatura presidencial. Fue precisa al ofrecer un gobierno de capitalismo popular; es decir, el fomento de la propiedad privada, la eliminación de la burocracia y la no intervención del Estado en el área económica. María Corina, luego de las elecciones que perdiera Henrique Capriles, nunca reconoció a Maduro.  De allí que los pases de factura en su contra, son interminables. Hasta la cobardía física se puso de manifiesto en la Asamblea, dándole golpes en su rostro. Pero María Corina, no se amilanó. Prosiguió su rol como representante popular, denunciando las arbitrariedades del régimen. Lugar que visitaba, sitio donde le advertía a los venezolanos, del desastre que se  nos venia encima; inclusive, en la OEA, denunció al régimen que imperaba en Venezuela. Luego, en una hermandad política, se unió a Leopoldo López, en  el 2014, con la consigna de "la salida" .Por supuesto, sus enemigos rojos la acusaron de conspiradora y le allanaron la inmunidad parlamentaria.

María Corina, demostró lealtad a sus votantes. A la oposición y especialmente lo ha hecho con Leopoldo López, con Antonio Ledezma y con los demás presos y perseguidos políticos. Su trayectoria pública en favor de la libertad, fue correspondida al ser designada como aspirante nuevamente a la Asamblea Nacional. Pero la retaliación y atropello a sus derechos ciudadanos, vuelven a perseguirla e inhabilitarla para repetir como diputada.

Los lectores han podido constatar mediante estas líneas, algunas de las razones por las cuales el comunismo, ha tratado por todos los medios posible de silenciarla. Algo que no han podido, porque ella mantiene intácta su lucha frente al desorden y la improvisación roja, que hoy detenta el poder en Venezuela.

Lo que nunca llegamos a pensar, era que la deslealtad hacia María Corina, proviniese de quienes se decían sus compañeros de batalla. Uno comprende la posición de la dirigencia oficial, pues ellos están en lo suyo; ellos no arribaron al poder, para congraciarse con la oposición. Pero que desde las propias filas de esa enMUDecida, le echen la partida para atrás a María Corina, es algo que no cabe en una conciencia democrática. No se puede aceptar esa falta de respeto. De dignidad. Ahora si es verdad, que tenemos que volver a replantearnos nuestra conducta a seguir en materia electoral. Si así es como esa oposición pretende ganar los escaños parlamentarios, pues, nos dan nauseas. No toleramos la canallada y la trastada. Ustedes, señores que han convalidado esta deslealtad, no merecen que el votante les tenga confianza. Lo que han ocasionado, es que los abstencionistas, se multipliquen. 

Lo único que pedía María Corina, era que Isabel Pereira, la supliera como candidata para el posible proceso electoral de diciembre. Solamente eso. ¿Es mucho lo que pidió? Requería de una persona, que no la traicionara, como lo hizo, el que hoy es postulado por el PSUV. La unión de los venezolanos, debe estar sujeta por la lealtad. Jamás por la víboras, que transmiten veneno.

Debemos dejar expresa constancia, que con María Corina Machado, nos une únicamente, el comportamiento de buenos ciudadanos. No tenemos el honor de conocerla personalmente. Entonces está muy distante la adulación. Nos mueven los principios políticos, que nos dictára Renny Ottolina. Despreciamos la deserción injusta. Somos directos. No cambiamos lo bueno por lo malo. No nos compran ni el poder ni la bajeza. Los argumentos del señor Torrealba, dan vergüenza. Es otro demagógo. Se refiere a María Corina, como hermana...Hay que ser cara dura.

Con solidaridad plena hacia María Corina Machado. Que los lectores juzguen.

La frase de hoy: "Existen tres cosas que me decepcionan: La hipocresía, porque no nos permite confiar. La injusticia, porque hace ver a unos más que a otros, cuando no se lo han ganado y la DESLEALTAD, porque deja sin piso, parte de nuestros principios" (Carrillo Navas ) .

Este artículo no estaba previsto para hoy, pero la traición a María Corina Machado, nos obliga a cambiarlo a última hora. Lo expresado, es un alerta para los lectores. Si queremos recobrar la credibilidad en algunos políticos, este deshonesto hecho, mueve a la reflexión.

¡ PÁSALO !

Será cambiado el próximo lunes, o antes, de ser necesario.

gastonecheverríac@gmail.com

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06 de agosto 2015 .