ADVERTENCIA...


Se ha determinado que los malos políticos de la oposición, han permitido que el comunismo se instaure en Venezuela. Que no es lo mismo que los políticos malos. Los que han secuestrado a los venezolanos. Pero los primeros, al no corregir sus inconsecuencias con la gente, terminarán también siendo malos. No obstante, en Venezuela, hay políticos buenos, que se dedican a la política para servirle al colectivo. Que entienden que su misión es luchar por el bienestar de sus compatriotas. Los políticos buenos, al dedicarse a hacer sacrificios por el pueblo, éste le reconoce y los elige para cargos, como presidente,senadores, diputados, gobernadores, concejales y otros de elección popular. Su limpia trayectoria, los hace merecedores de buenos políticos. Ese calificativo les permite ganarse la credibilidad. "El político se convierte en estadista cuando comienza a pensar en las próximas generaciones y no en las próximas elecciones", una cita excelente de Winston Churchill. Es por ello, que hoy hacemos una advertencia a los políticos. Los que hoy, lamentablemente, no han sabido defender sus deberes y derechos. Le han dado la espalda al pueblo y los políticos malos se han permitido con facilidad, engañar a la gente, para crear en el País, un sistema dictatorial. Los políticos malos no tienen vergüenza. A ellos solo les importa obtener el poder para enriquecerse a costa del bolsillo de los venezolanos y a la vez cercenar sus derechos democráticos. La gente en Venezuela, ha perdido otra vez la credibilidad de los políticos. Las consecuencias de esas inconsecuencias de los políticos, han determinado que la Patria esté al borde del caos total. Es el cultivo de la mediocridad de los políticos malos, que nunca se prepararon para saber administrar la nación con decencia y honestidad.
La característica de los políticos malos, es arrasar con la economía. Hacer desaparecer las libertades en todos los sentidos. Crear el miedo en la población, como lo dijéramos en nuestro artículo anterior. Impedir que los pobres se superen y terminen siendo más pobres. Esto último, lo expresó recientemente un ministro del actual régimen; es decir, un político malo. En definitiva, éstos políticos nos llevan a la ruina y al desorden. Por ello, es nuestro deber, advertir y orientar a la población, en especial a los más desposeídos, para que junto a la juventud, logren alcanzar a través de las protestas  un cambio democrático en Venezuela.
La advertencia a los malos políticos y a los políticos malos, es para que no se sorprendan de las reacciones que con toda seguridad se van a producir cívicamente en el País. No es cuestión de guarimbas, ni subversión. Es una actitud normal, en una juventud que no quiere irse de su Patria y está dispuesta con los trabajadores, a luchar por restablecer una democracia amparada en su Constitución Nacional y demás leyes de la República. Tal como lo hemos venido reiterando: una democracia con orden. No podemos permitir que más nunca los malos políticos y los políticos malos, vuelvan a ejercer el poder en Venezuela. Hay que construir una nueva Venezuela. La que sea ejemplo de libertad y donde cada ciudadano pueda estudiar y trabajar para superarse. La política no se hizo para engañar, ni para oprimir. La política debe estar enmarcada en proporcionar al pueblo, la paz y la tranquilidad. Hagamos pues una reflexión y pongámonos de pie para salvar la democracia. Dice el ASOMADITO: 1) Al relanzar al cadáver de la MUD, están perjudicando y quemando a dirigentes que más bien han sido buenos políticos. 2) La juventud venezolana, encabezada por los estudiantes, van a dar la sorpresa en Venezuela,,,anótenlo! 3)  Dos aviones de combate de las FAV, volaron sobre la capital, por más de media hora, creando nerviosismo. Vaya usted a saber las causas de algo imprevisto. 4) Lo ocurrido en la ONU, es otra advertencia. La política mala, fue el hazmerreír de la reunión mundial.La frase de hoy: " La palabra advertencia solo aparece una vez en la Biblia, y es en el Nuevo Testamento, pero vale por miles"( Lucas17:20 ).
24 de septiembre 2014 . gastonecheverriac@gmail.com

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