que le sirvieran, sufren de una manera bochornosa. Señores, esa inmoralidad se les acabó. Las reglas las supervisa el Pueblo. Si quieren el poder, gánenlo sirviendo a la gente y cumplan, porque si violan la Constitución, tendrán que renunciar. La democracia se respeta. El orden debe vencer al desorden. Al bochinche y al relajo. Estamos atravesando una tranquilidad peligrosa. Esa confianza en afirmar que todo está controlado no parece ser una realidad. Mucho menos cuando el poder lo sostiene la fuerza que no es símbolo de tranquilidad ni de paz. Es la Venezuela, que transita por caminos empedrados.
La frase de hoy: " Las miserias de todos los hombres se derivan de no poder sentarse tranquilos en una habitación estando solos" ( Blaise Pascal ) .
Este artículo será cambiado en cualquier momento. ¡PÁSALO!
gastonecheverriac@gmail.com.
04 de junio 2018 PM.
NOTAS: 1) Sería interesante saber cuánto cuesta fundar un partido o una plataforma política. ¿Cómo se mantiene? Resulta que los alcahuetes que convalidaron el sainete del pasado y triste espectáculo del 20 de mayo, salen anunciando lo que mucho antes habían planificado. Fundar una Plataforma política para hacerle oposición al régimen. Se comprueba una triquiñuela de esos políticos que también PALIVENCA, les dio su paliza junto al comunismo. Seràn seguramente unos opositores con libreto. Quieren emular a los que luego de Caldera II, llegaron al poder. Esta vez se van caer de un coco. Allí hay puros despechados. Ay Mamá! 2) En el acto Venezuela Unida No se rinde, el Padre José Ugalde, expuso lo que se debe hacer frente a la dictadura. Cojan ese trompo en la uña, los bohemios de la platabanda, ah, es plataforma. Ay Mamá!! 3) Andrés Velásquez, esta en sintonía con lo que dice la mayoría del Pueblo. Hay un show con las liberaciones. Ojalá salieran todos los presos políticos sin excepción. Lo que la gente si afirma, es que la crisis no se va a superar con esa obra cubana y mucho menos con la respiración artificial que le brindan Falcón y sus acompañantes al régimen rojo, rojito. ¡Ay mamá!
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